Es una disciplina terapéutica que permite evaluar y tratar disfunciones del suelo pélvico y de la esfera sexual. Cuando los músculos del suelo pélvico están débiles, demasiado tensos o han sufrido alguna lesión (desgarro, episiotomía) se puede alterar el funcionamiento de los órganos pélvicos, lo que puede causar pérdidas de orina, prolapsos, problemas durante las relaciones sexuales (como dispareunia y vaginismo), pérdidas de gases o de heces, dolor perineal, estreñimiento terminal, entre otras patologías que pueden relacionarse con el postparto, la menopausia o actividades de alto impacto físico.
Pero el tema del suelo pélvico no es sólo cosa de mujeres, algunas de las patologías masculinas como la disfunción eréctil, incontinencia urinaria, perdida de gases o heces, y alteraciones del funcionamiento urológico y sexual tras una cirugía de próstata también pueden ser tratados con fisioterapia de suelo pélvico.
El objetivo de la fisioterapia del suelo pélvico es prevenir y tratar estas disfunciones. Ante un problema que afecte al suelo pélvico es imprescindible la correcta valoración por parte de un fisioterapeuta especializado, que conocerá y aplicará las técnicas más apropiadas para cada caso.