Es una enfermedad viral y contagiosa, que afecta fundamentalmente a niños pequeños (0-5 años), pero que puede contagiarse a personas de todas las edades. Su incidencia es mayor en personas con poca higiene y sus brotes se presentan durante todo el año, aunque es más frecuente en primavera y verano.
La enfermedad boca-mano-pie es la forma más conocida de infección por enterovirus y se llama así por la distribución característica de las lesiones cutáneas que causan las lesiones vesiculares (pequeñas ampollas en la piel, de pocos milímetros de diámetro) en las palmas de las manos, las plantas de los pies y el interior de la boca, sin embargo pueden presentarse en otras partes del cuerpo como tronco, dorso, espalda, glúteos…
Además de las lesiones cutáneas, estas infecciones acostumbran también a dar fiebre, que puede ser alta (40º) y prolongada (entre 3 y 6 días).
Aunque el aspecto de las lesiones es común en otras infecciones, lo que nos hará sospechar que se trata de la enfermedad boca-mano-pie es la localización de esas pequeñas ampollas.
¿Cómo se contagia? Se transmite con facilidad de persona a persona a través del contacto directo por vía fecal-oral (heces) y aérea (secreciones de nariz, boca o gotitas que se lanzan al toser). El virus permanece en las heces sobre todo o en las vías respiratorias varias semanas después de padecer la enfermedad. También puede sobrevivir mucho tiempo en los objetos (pañuelos, mesas, sábanas, toallas, etc.), facilitando su transmisión.
La importancia de la Preparación al Parto
La preparación al parto es una fase crucial en el viaje hacia la maternidad que merece una atención especial. Para